Levantar la mirada

Por lo general creemos que no pertenecemos al lugar en que nacimos, y que deberíamos estar en otro lado. Y andamos por la vida en babia, ya sea mirando para arriba o para el piso (por lo cual creo que lo hacemos para evitar mirar a nuestro alrededor) Tenemos que volver la mirada horizontal, supongo que con un poco de predisposición siempre habrá un bello horizonte.

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Experimento

Espera a que sea de noche. Apaga la luz, prende una vela y trata de leer poniendo la carta de un amigo cerca de ella. Aléjalo poco a poco y observa lo que pasa con la luz de la vela a medida que te alejas. Cada vez es más difícil leer a la luz de la vela porque ésta cada vez es más tenue. La luz que emite un objeto luminoso se va atenuando con la distancia. Pero esto no quiere decir que la carta ni el amigo deje de existir. Y no hace faltas que leas lo que la carta dice. Curiosamente esa pequeña luz en la noche parece siempre acortar las distancias.